• Victimas de violaciones graves los acusan de Hostigamiento y Abusos de Autoridad
• Militares obligados a identificarse y a estar acompañados de FGR o CNDH
Nuevo Laredo, Tamaulipas, a 29 de Noviembre del 2024.- Familiares de víctimas de violaciones graves a los derechos humanos denunciaron la presencia de retenes ilegales del Ejército Mexicano en carreteras que comunican a los estados de Nuevo León y Tamaulipas al considerar que su personal comete abusos de autoridad y hostigamiento durante sus revisiones.
Ante el Comité de Derechos Humanos de Nuevo Laredo, familiares de víctimas han denunciado que dichos retenes del Ejército Mexicano les obligan a identificarse, revisar el interior de sus vehículos, teléfonos celulares e incluso las bolsas personales de mujeres “pero de manera altanera, como si estuvieran drogados o alcoholizados”.
Uno de estos retenes inconstitucionales se encuentra ubicado de manera permanente en el entronque de la carretera federal Nuevo Laredo-Piedras Negras a la altura del crucero de las poblaciones Colombia-Anáhuac integrada por tres camionetas del Ejército Mexicano y un vehículo blindado táctico Ocelot.
El presidente del Comité de Derechos Humanos de Nuevo Laredo, Raymundo Ramos Vázquez, consideró que este tipo de retenes por parte del Ejército Mexicano son violatorios a los derechos humanos toda vez que el personal que interviene se niega a identificarse, no está acompañado de funcionarios de la Fiscalía General de la República (FGR) o de la propia Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) en caso de pretender ayudar a los turistas mediante un Puesto de Auxilio Carretero.
Otro de los retenes ilegales se encuentra ubicado en la antigua Garita del Kilómetro 26 en la carretera federal Nuevo Laredo-Monterrey en donde los militares ocultan sus unidades entre la maleza y a distancia un elemento lanza una luz láser color verde hacia el interior de los vehículos que consideran “sospechosos”.
De este lugar choferes de tráileres y automovilistas particulares han denunciado que el personal militar les cobra hasta mil pesos por dejarlos pasar sus retenes y en caso de no pagarles amenazan con llevarlos detenidos ante el Ministerio Público inventándoles la comisión de algún delito.
En al menos tres casos, el Comité de Derechos Humanos ha solicitado la implementación de Medidas Cautelares en favor de las víctimas de este tipo de retenes, cuya identidad se reserva,pero la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) respondió en forma negativa y decidió cerrar los expedientes de Queja CNDH/2/2024/10723/Q, CNDH/2/2024/10286/Q y CNDH/2/2024/4868/Q, en donde se responsabilizaba al personal del Ejército Mexicano de abuso de autoridad, actos de molestia y amenazas.
El Comité de Derechos Humanos de Nuevo Laredo también ha denunciado públicamente que el Uso Excesivo de la Fuerza por parte del personal del Ejército Mexicano representa una amenaza permanente para la población considerando que este año ha cobrado la vida de nueve personas, entre ellas una niña de 8 años, un adolescente de 16, una enfermera de 38 años y cinco hombres adultos.