Durante el pasado fin de semana largo, la Escuela Primaria Mariano Matamoros, situada en la calle 17 y Guerrero, fue blanco de un robo que pone en evidencia la urgente necesidad de reforzar la seguridad en planteles educativos.
Delincuentes forzaron el acceso principal, ingresaron hasta la dirección y sustrajeron dinero, bocinas, así como víveres del programa de desayunos escolares. Esta lamentable situación afecta directamente a más de 270 estudiantes que dependen diariamente de estos apoyos.
Autoridades acudieron al lugar para levantar el reporte, sin embargo, al tratarse de un día festivo no había presencia de personal directivo o docente.
La reiteración de estos hechos delictivos preocupa a la comunidad educativa. La docente Edith Villanueva solicitó mayor presencia policial durante las noches, al señalar que es la segunda vez que son víctimas en poco tiempo.
Desde aquí, hacemos un llamado urgente a las autoridades educativas y de seguridad para atender esta problemática que pone en riesgo el futuro de nuestros estudiantes.