Las autoridades filipinas elevaron este martes a 63 los muertos a causa del naufragio ocurrido el viernes pasado del transbordador “MV St. Thomas Aquinas”, que también ha provocado un derrame de combustible en la región central del archipiélago.
La Guardia Costera de Filipinas indicó que otras 63 personas continúan desaparecidas, mientras que los buzos continúan con las tareas de rescate en las aguas de la localidad de Talisay, en la provincia de Cebú.
El ferry de pasajeros, que viajaba con unas 870 personas abordo, tardó pocos minutos en zozobrar tras colisionar con el buque mercante “MV Sulpicio Express”, que sufrió daños en el casco pero no se hundió.
Las autoridades están investigando las causas del accidente y los posibles responsables, aunque el informe preliminar señala que fue el mercante el que chocó con la parte trasera del “MV St. Thomas Aquinas”.
Al drama humano se ha sumado ahora el desastre ambiental, después de que el carburante del ferry contaminara las aguas en varias localidades de Cebú, popular por sus playas y zonas de buceo turísticos.
El “Thomas of Aquinas” viajaba con 20 toneladas de combustóleo y 120 toneladas de combustible búnker cuando chocó contra el “MV Sulpicio Express”.