Un carro bomba estalló en un poblado del noroeste de Siria, controlado por los rebeldes, con un saldo de por lo menos 12 fallecidos, informaron grupos de activistas.
Dos grupos de activistas informaron que los atentados ocurrieron el lunes en un mercado del poblado de Darkoush, en la provincia de Idlib, donde dejaron también decenas de heridos. Los grupos, que dependen de una red de activistas en el terreno, ofrecieron cifras de fallecidos distintas, algo común después de atentados de magnitud.
El Observatorio Sirio de Derechos Humanos, con sede en Gran Bretaña, dio que 20 personas fallecieron, mientras que los Comités de Coordinación Local informaron que los muertos fueron por lo menos 12.
Los atentados con carros bomba se han vuelto comunes en la guerra civil siria, que ahora está en su tercer año y que ha provocado la muerte a más de 100.000 personas.
Otros dos carros bomba explotaron cerca del edificio de la televisión estatal en Damasco el domingo.