Luego de que elementos del Ejército Mexicano asesinaron a cinco jóvenes, uno de ellos, ciudadano estadounidense, en la colonia Manuel Cavazos Lerma, al poniente de Nuevo Laredo, el presidente del Comité de Derechos Humanos, Raymundo Ramos Vázquez, afirmó que familiares de las víctimas interpusieron una demanda en contra del personal militar que participó en este hecho violento considerado una de las peores masacres que se han registrado en esta ciudad fronteriza.
Además están solicitando al Ministerio Público la entrega de los cuerpos para darles cristiana sepultura.
Cabe mencionar que los militares actuaron de manera arbitraria, dado que los jóvenes no portaban armas, ni drogas, ni municiones, nada ilícito, información dada por las autoridades federales.
Una de las víctimas fue identificada por su padre como Gustavo Suarez, de nacionalidad estadounidense, quien visitaba a sus familiares, y había salido con cinco amigos a una discoteca, sin embargo, al momento de dejarlos en sus hogares, fueron atacados sin motivo alguno por los soldados, y en este violento acto por parte del Ejército mexicano, también resultó herido un joven más quien presenta estado de salud grave.
Las víctimas viajaban en una camioneta Chevrolet Silverado color blanco 2020, propiedad del joven norteamericano.
‘Estamos pidiéndole a la Fiscalía General de la República, que atienda estas demandas formales y que proceda en consecuencia a integrar una carpeta de investigación que permita llevar ante un Juez de Control a los militares que hayan intervenido en un primer momento en estos homicidios’, informó Ramos Vázquez, quien agregó que elaboraron un escrito dirigido a la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), al presidente de México, Andrés Manuel López Obrador.
Además los militares cometieron abuso de autoridad, disparando un arma frente a las y los ciudadanos, poniendo en riesgo la vida de la población.
‘Estamos haciendo un llamado a organismos internacionales para que adopten medidas cautelares no solamente para mí, sino para mis compañeros periodistas y también para las familias’, señaló el presidente del Comité de Derechos Humanos, quien fue agredido por personal militar, al igual que periodistas de esta frontera.
Existen pruebas a través de videos que los jóvenes en ningún momento agredieron a los militares, y además las víctimas de la ejecución extrajudicial estaban vivas, y solicitaban ayuda médica, misma que fue negada por el Ejército Mexicano que negó el acceso a los cuerpos de emergencia.
