Por Alfredo Peña
Ciudad Victoria.-Luego de que un comando armado asesinó a tres integrantes de una familia y lesionó a otros cuatro, habitantes de Congregación Garza El Charco de Reynosa, Tamaulipas, acompañaron a los deudos a enterrar los restos, pero apenas acabó el acto fúnebre y el rancho se convirtió en un pueblo fantasma al decidir abandonarlo.
La tarde de este martes los habitantes iniciaron un éxodo hacia la ciudad de Reynosa; van huyendo de la violencia que desde hace tres meses comenzaron a sufrir por parte de células del crimen organizado.
La gente no dejó nada, igual cargo con chivos, marranos, reses y gallinas al considerarlos como el único patrimonio para poder sobrevivir.
“No queremos besos, ni abrazos; queremos que los maten” dijo Remigio “N” que al igual que su familia se salieron con la incertidumbre y el miedo al no saber de qué van a vivir en la ciudad.
El nombre se lo inventó al solicitarlo para poder hablar y para proteger su identidad ante el temor de ser asesinado en represalia.
El poblado que quedo abandono es Congregación Garza El Charco, ubicado en la carretera Reynosa a San Fernando, además considerado como la cuna que vio nacer a Reynosa.
Sus habitantes lo consideran como mágico debido a la existencia de un gran número de casas que fueron fabricadas desde 1800.
“Hay tumbas que datan desde 1880 y nuestros ancestros hablan también sobre historias de la revolución que ocurrieron aquí” cometa Remigio.
El pequeño poblado comenzó a sentir la violencia tres meses atras cuando un comando armado llego y tiroteo las fachadas de algunos negocios. Posteriormente siguió el asedió.
Por las noches los pobladores se iban a dormir al monte y fue en la semana pasada cuando los criminales volvieron e incendiaron seis casas.
Aunque pidieron auxilio nadie los escuchó, quedando a merced del hampa.
“Anteriormente ya habían secuestrado a una persona pero no supimos después qué paso”.
Cuando mataron a tres integrantes de la familia Olivares y lesionaron a cuatro (el sábado por la noche) las autoridades reaccionaron pues este lunes el Grupo Coordinación Estatal para la Construcción de la paz en Tamaulipas anunció que la SEDENA y la policía estatal iniciarían recorridos para mantener la paz.
El ofrecimiento no fue suficiente para que alrededor de 40 familias decidieran abandonar casas, campo y escuelas.
El éxodo ha provocado temor en otros poblados como El Grullo y La Blanquita por lo que familiares de estos habitantes también comenzaron a comunicarse, pidiéndoles que abandonen sus tierras ante el temor de que ahora sigan con ellos.
“Estuve platicando con un amigo y él me dijo que consiguió una casita cerca de Reynosa, a orilla de la carretera federal, pero solamente podría estar viviendo unos cuatro días ya que el dinero no le va alcanzar para más tiempo”.
Aseguro que todos los habitantes viven del campo y que ninguno de ellos cuenta con un trabajo cerca de la ciudad por lo que ven un negro futuro si las autoridades no les responden.
Remigio aseguró desconocer el motivo por los cuales el crimen organizado ha estado acosando y lamentó que como ciudadanos sufran y se queden en la calle ante una violencia que no puede ser controlada.
