Un proyectil cayó hoy en el recinto de la embajada rusa en Damasco, ubicada en la zona de Mazraa, sin que haya informaciones de que se hayan registrado víctimas, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
La organización, con sede en Londres, pero con una amplia red de activistas sobre el terreno, recordó que el área de Mazraa ha sido anteriormente objetivo de bombardeos.
Rusia es uno de los principales aliados del régimen de Bachar al Asad desde el inicio del conflicto en el país árabe a mediados de marzo de 2011.
Por otro lado, en las afueras de la capital siria, un número indeterminado de personas fallecieron o resultaron heridas por la explosión de un coche bomba en la localidad de Nabek.
Las circunstancias en las que se produjo el estallido varían según la fuente consultada.
La agencia de noticias oficial Sana señaló que el ejército del régimen ha frustrado un intento de “ataque terrorista suicida” que iba a ser perpetrado con un coche bomba en una zona industrial.
Los soldados “destruyeron” el vehículo antes de que entrase en el área, lo que causó la muerte del supuesto terrorista que lo conducía y heridas a ciudadanos, indicó Sana.
El Observatorio Sirio de Derechos Humanos dijo, por su parte, que un supuesto militante del grupo Estado Islámico de Irak y del Levante, vinculado a Al Qaeda, detonó un coche bomba cerca de un edificio de la Administración de Tráfico en Nabek.
La organización agregó que hubo muertos y heridos, entre ellos varios miembros de las fuerzas del régimen.
