Al menos 51 personas han muerto tras ingerir alcohol contaminado.

Según cifras oficiales libias, 38 personas habrían muerto en los hospitales de la capital libia, Trípoli, y otros 13 cuando se dirigían a la vecina Túnez para recibir tratamiento.
El estado de emergencia ha sido declarado en los hospitales de la capital.
La producción o el consumo de alcohol es ilegal en Libia, pero está disponible en el mercado negro.
Un vocero del gobierno dijo que se había rodeado a un número de lugares sospechosos de destilar alcohol y advirtió que la fuerza sería utilizada si fuese necesario.